Así es que Judas se une a los enemigos. En la forma que los evangelios describen la traición, revelan que no hay una gota de amor hacia Jesús en Judas, que siempre estuvo a su lado por los beneficios que podría alcanzar y que al ver que no había libertador sino un mártir, se cambia de bando.
Judas planea aprovecharse de la confianza que Jesús tenía en él para traicionarlo. Judas no sabe que Jesús es plenamente consciente de sus acciones y que no era necesaria esa traición porque Él se iba a entregar como el cordero que quita el pecado al mundo. Pero Judas eso no lo entendía.
Cuando llegó la noche, se sentó a la mesa con los doce. Y mientras comían, dijo: De cierto os digo, que uno de vosotros me va a entregar. Y entristecidos en gran manera, comenzó cada uno de ellos a decirle: ¿Soy yo, Señor? Entonces él respondiendo, dijo: El que mete la mano conmigo en el plato, ése me va a entregar. A la verdad el Hijo del Hombre va, según está escrito de él, mas ¡ay de aquel hombre por quien el Hijo del Hombre es entregado! Bueno le fuera a ese hombre no haber nacido. Entonces respondiendo Judas, el que le entregaba, dijo: ¿Soy yo, Maestro? Le dijo: Tú lo has dicho. Mateo 26:20-25
Y estaban los doce con Él celebrando la pascua, y Jesús cuenta que sabe de la traición, y hay once hombres, que han estado por tres años con Él, que ni tienen consciencia de si serán ellos los traidores y el que sí sabe no quiere quedar en evidencia e intenta pasar por asombrado y realiza la misma pregunta que los otros: “¿Soy yo, Maestro?”
¡Qué rostro de piedra!
Y Jesús le muestra que sabe exactamente lo que hará y le responde “Tú lo has dicho”, pero Judas, nada de darse por aludido.
¿En qué mesa estás?
¿En la de los fariseos?
¿Estas en la de Simón el leproso?
¿En la del Aposento Alto?
¿Cómo estás en tu mesa?
¿Estás consciente de tener un carácter obediente?
¿Estás feliz y agradecido con Dios?
¿O estás descontento con lo recibido y listo para abandonarle?
¿Y estás dispuesto a darle lo mejor de tu vida?
¿Cómo estás a la mesa del Maestro?
¿De rodillas, entregado por completo?
¿Feliz y agradecido de la nueva vida que Dios te regala a pesar de todas las dificultades?
¿En qué mesa planeas estar por el resto de tu vida? El resto de tu vida que comienza hoy.
¿Que has sido un pecador hasta hoy? Jesús sabía que allí estaban hombres que le fallarían y no por eso dejó de invitarlos a la mesa. Sabe que le fallaremos, pero sabe cuáles de nosotros volveremos a sus pies con integridad de corazón.
¿A qué lado de la mesa?
Esta predicación o mensaje trata sobre: Mateo, Ministerio, Misión, Santa cena, Semana Santa
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