Lección 1: El nacimiento de Sansón.
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Para memorizar: Entonces oró Manoa a Jehová, y dijo: Ah, Señor mío, yo te ruego que aquel varón de Dios que enviaste, vuelva ahora a venir a nosotros, y nos enseñe lo que hayamos de hacer con el niño que ha de nacer. Jueces 13:8
Pasaje Bíblico de referencia: Jueces 13
Objetivos:
-aprender que Dios tiene un propósito para cada persona
-el propósito se cumple si nosotros obedecemos
-Dios nos da lo que necesitamos para cumplir el propósito
Descripción:
-el anuncio del Ángel de Jehová
-el pedido de dirección de Manoa y su esposa
-las características de Sansón
-la vida que debería llevar Sansón
Actividades: realizar un ángel de papel. https://www.youtube.com/watch?v=HJQiBAuLlpo
Lección: Israel había vuelto a pecar, así que Dios los castigó por medio del dominio de los filisteos por cuarenta años.
Para liberarlos de los filisteos, Dios tenía el propósito de usar un hombre que aún no había nacido y lo haría nacer en un matrimonio que nunca había podido tener hijos.
Manoa y su esposa no podían tener hijos, pero un día, a ella se le apareció el Ángel de Jehová y le dijo que tendría un hijo varón.
Con el nombre del Ángel de Jehová, en el Antiguo Testamento, se describen todas las apariciones de Jesús antes de venir a la tierra como hombre.
El niño que esta señora tendría era tan especial para Dios que ella debía seguir las reglas del nazareato durante todo su embarazo, y el hijo que tendría debía ser nazareo toda la vida.
Sólo Sansón, Juan el Bautista y Jesús debieron ser nazareos todas sus vidas. Los otros nazareatos de la Biblia fueron voluntarios y por determinado tiempo. El de Sansón fue obligatorio.
Ser nazareo implicaba no poder comer nunca uvas ni derivados de ella, no consumir nada alcohólico ni ninguna de los animales considerados inmundos, no tocar ningún cadáver, ni de animales ni de personas, y nunca cortarse el cabello.
Sansón obedeció su nazareato sólo en parte, no cortarse el cabello, y más adelante veremos también su error en esto.
Cuando la esposa le cuenta a Manoa lo que el Ángel le había dicho, él quiere también hablar con el Ángel de Jehová.
Su deseo no era porque dudara, sino porque quería que le enseñaran cómo debía criar al niño para que cumpliera el propósito de Dios.
Y cuando nació, le pusieron de nombre Sansón.
Para todos y cada uno de nosotros, Dios tiene un plan, un propósito, Dios quiere que hagamos cosas especiales para que la gente le conozca. Todo lo que necesitamos para cumplir con ese plan, Dios nos las dio. Que el plan se cumpla depende sólo de nuestra obediencia, la vida de Sansón será para nosotros un ejemplo de eso.
Y cuando vayas a ser papá o mamá, nunca te olvides, el hijo que tendrás es parte del plan de Dios y tu responsabilidad ante Dios será pedirle que te enseñe cómo criar a tus hijos para que ellos también puedan cumplir con el plan de Dios.