Confrontando o apoyando las nuevas ideologías de la mujer actual? Hasta que punto y cómo las mujeres pueden ser protagonistas en la Biblia ¿Sabías que las mujeres también son valientes? Sí lo son, y Débora y Jael son ejemplo de eso.
Las aldeas quedaron abandonadas en Israel, habían decaído, hasta que yo Débora me levanté, me levanté como madre en Israel. Jueces 5:7
Luego de la muerte de Josué el pueblo de Israel comenzó a vivir de forma desorganizada y se llenaron de pecados. De tanto en tanto, Dios fue levantando jueces que pusieran orden y volvieran al pueblo a la obediencia.
En sus períodos de desobediencia, Israel se olvidaba de su Dios, el único y verdadero, que les había librado de la esclavitud y los llevó por el desierto hasta la tierra que les había prometido.
Dios les había dado la orden de vivir en paz entre ellos, pero ellos tenían rivalidades.
Dios les había ordenado eliminar a sus enemigos, ellos hicieron alianzas…
Debido a todas estas desobediencias, Dios los entregaba en manos de sus enemigos para que aprendieran la lección y se volvieran a Él. Porque en medio de las aflicciones siempre recordaban a su Dios y se volvían a Él y clamaban por ayuda y perdón y Dios respondía.
Jehová levantó jueces que los librasen. Jueces 2:16
Entre todos ellos hubo… una mujer. Una mujer dirigida por el Espíritu Santo de Dios para la liberar y preservar Israel.
Débora comenzó a juzgar a Israel entre los años 1200 y 1125 antes de Cristo. Vivía entre Ramá y Betel, recibía a todos los que venían con sus diferentes problemas de pueblos, vecinos, familiares, etc., y Dios la guiaba a dar el consejo perfecto.
Por eso, cuando la situación fue muy peligrosa, también recurrieron a ella.
Había un hombre al que todos temían, Sísara, comandante del ejército de Jabín, rey de Canaán, a quien Dios le estaba permitiendo que azotara a Israel.
Por 20 años este comandante había hecho sufrir a Israel. Y el pueblo necesitaba que Dios les librara de la crueldad de estos hombres.